90 millas hasta el paraíso - Vladímir Eranosián

90 millas hasta el paraíso

Страниц

310

Год

2020

Книга "90 millas hasta el paraíso" - это захватывающий политический детектив и исторический триллер, который привлечет широкую аудиторию любителей данного жанра. Рассказ основан на реальных событиях и повествует о самой скандальной похищении в Латинской Америке в 2000 году - похищении кубинского мальчика Эльяна Гонсалеса. Судебный процесс, связанный с этим делом, стал беспрецедентным политическим шоу с участием высших лидеров государств, разведывательных агентств и преступных группировок. По мнению автора, команданте Фидель Кастро имел свои личные мотивы для возвращения ребенка на родину. Однако главными героями романа являются обычные люди, которые не поддались угрозам, шантажу и взяткам, и боролись за Эльяна до конца в этой невероятной истории.

В книге наряду с рассказом о похищении Эльяна также представлены уникальные факты, которые добавлены автором, дополняя сюжет и обогащая его. Роман погружает читателя в напряженную атмосферу политических интриг и международных заговоров, а также раскрывает масштабную организованную преступность и сложные отношения между государствами.

"90 millas hasta el paraíso" - это не просто расследование, это история о силе человеческого духа, принципиальности и жертвенности, которые предстоит испытать героям. Читатель окажется на грани эмоционального напряжения, вместе с героями будет переживать и надеяться на благополучный исход. Книга "90 millas hasta el paraíso" - это уникальное произведение, которое покорит сердца читателей и оставит незабываемые впечатления.

Читать бесплатно онлайн 90 millas hasta el paraíso - Vladímir Eranosián


¡El secuestro que conmovió al mundo!


En los momentos transcendentales de la historia de un pueblola actitud de una persona puede compensar la ignominia, con la que han cubierto a este pueblo todos sus traidores tomados en conjunto

                                                Fidel Castro


Se lo dedico a mi mamá, a mi hijo Máximo, y a todos los padres.


El tema está basado en sucesos reales, en la cronología histórica y fuentes fidedignas. Lo imaginario solamente figura para darle una mayor veracidad a la narración.



Realmente, esta isla es el lugar más hermoso de los que haya podido ver el hombre.

Cristóbal Colón


* * *

2 de diciembre de 1999.

La Habana, Cuba. Palacio de la Revolución, Residencia del Presidente del Consejo de Estado de la República de Cuba Fidel Castro Ruz


Ellos no se han olvidado de qué fecha es hoy. Este día, hace 43 años, él junto con ochenta y dos rebeldes, entre los cuales figuraba el Che, contraído por el asma y fatigado por el mareo, desembarcaron del yate “Granma”, para vencer o morir…

La mesa fue servida en la sala de descanso, adyacente al despacho.

Había bogavantes, langostas, langostinos tigres en una salsa agridulce, un delicioso pescado panga, frito en crema a la plancha. A la par con todo eso a Fidel le sirvieron su vino español preferido, con 50 años de solera, así como una botella de champaña “Dom Pérignon”. Toda esta abundancia provocadora podría desorientar y desanimar a cualquiera, pero de ninguna manera al líder. El Comandante estaba a la espera de una reunión importante. El hermano Raúl trajo a la capital a Juan Miguel González Quintana, oriundo de la provincia de Cárdenas. Era un empleado ordinario, cajero en uno de los hoteles de Varadero. Por él, mejor dicho, por el hijo de 6 años de edad, se desencadenó un escándalo internacional.

Un día antes, los compañeros de lucha desaconsejaban seguir en el motivo de la juez americana, con un típico apellido latinoamericano Rodríguez, e intentaban convencerle de que no se debía permitir al cándido Juan Miguel presentarse ante el juzgado en los EE.UU. Raúl aseguraba que a este jovencito en América le estaba esperando un refinado tratamiento psicológico y un soborno directo.

– No podrá resistir – así lo declaró el hermano un día antes, y, a pesar de todo, en el fondo del alma quisiera que hubiera un milagro. Él personalmente se dirigió a Cárdenas, para traer a La Habana al padre inconsolable.

– ¿Qué te parece, no fallará? – por debajo de las espesas pestañas negras miraban a Raúl aquellas mismas pupilas fogosas, que podían hacer quemar a cualquiera en los agudos instantes del asalto al cuartel Moncada, pero cuyas llamas se han empañado desde los días de la victoria de la Revolución. No por la desilusión de los ideales, sino de la traición humana.

– Ya no estoy seguro– pronunció pensativamente Raúl. – Es demasiado joven y demasiado categórico en sus reflexiones.

– Nosotros también éramos jóvenes, éramos maximalistas.

– Pero nosotros luchábamos en nuestra tierra, mientras que él deberá enfrentarse con el enemigo, cabe decir, en la misma guarida de ellos, en Miami, donde han arraigado estos canallas, “gusanos”.

– ¡A la voluntad de Dios!

Los ojos de Raúl se entornaron involuntariamente. ¡Quién hubiera podido pensar que a fines de los años noventa el ateísmo de Fidel empezara a retroceder bajo el empuje de las dudas que surgieron en su alma impetuosa! No retornará a sus manantiales de adolescente… En su infancia se consideraba ser uno de los más aplicados novicios en el colegio de jesuitas. Transcurridos unos años debido a los dogmáticos retrógrados y a los pedantes atrasados del ambiente de los superiores, de manera impredecible se hizo ateo. La muy creyente madre católica nada pudo hacer con la pérdida de la fe del hijo. La mente curiosa de este exigía pruebas, mientras que Lina Ruz – hija de una bruja autodidacta – no disponía de una formación sólida. Cabe decir, a Stalin los estudios en el seminario espiritual no le impidieron gobernar a los ateístas. Esto es un hecho. A lo largo de toda la vida él citaba el Evangelio, y en lo que se refiere a la Iglesia Ortodoxa, destruida por Lenin, esta aumentó la cantidad de parroquias precisamente durante el culto a la personalidad de Stalin.